martes, febrero 28, 2006

LATINOAMÉRICA Y LA INDIGENIDAD

Evo morales se erige como un referente provilegiado de la aborigenidad latinoamericana. Esta en su acccionar la posibilidad de actualizar el proyecto interrumpido de las etnias indígenas u originarias. Sus gestos parecen encaminarse a defender la autoctonía, entendida como la originalidad y el rechazo de la impostura. El traje propio de los americanos (sea cual fuere) es Otro respecto del traje europeo. Lejos de que estemos proponiendo la defensa de una suerte de "indigenismo chauvinista" sino de una modesta reivindicación de la particularidad, de la "diferencia". Por cierto que vestirse latinoamericanamente no es una solución para 500 años de sometimiento, pero es un gesto de adulta independencia, la enunciación simbólica y fáctica de la autoestima que la imágen que los europeos han cristalizadoy que nos conminaron a internalizar mediante las múltiples vías de domesticación que el poder vehicula.
Evo Morales, paradójico presidente de la nación moderna, encarna en sus gestos cotidianos una prometedora reapropiación de lo propio. Es hora de vigilia activa: acompañar con prácticas y teorizaciones este gesto de levantar el rostro aborigen, de pronunciar la voz propia sin verguenzas y sin inconducentes soberbias.